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Ecuador: Reforestar los manglares para proteger los medios de vida

WFP apoya a Inginio y su comunidad a sostener el ecosistema de manglares que mitiga los efectos de la crisis climática
, Chloé Staller
Hombre en un barco con provisiones
Los manglares de San Lorenzo (Ecuador) son lo más altos del mundo. Foto: WFP/Giulio d'Adamo

¿Sabías que los manglares son el ecosistema más efectivo para la retención del carbono? Son capaces de almacenar entre tres y cuatro veces más carbono que los bosques terrestres. Por ello, la reforestación de los manglares es esencial para reducir las causas del efecto invernadero y mantener el equilibrio global del CO2.

Hombre apoyando contra la pared
Inginio Castillo es un líder comunitario que protege los manglares en San Lorenzo, Ecuador. Foto: WFP/Giulio d'Adamo

Inginio Castillo, líder comunitario de Ecuador, ha dedicado su vida a la protección, conservación y reforestación de los manglares en la provincia de Esmeraldas.

Cuando era muy joven, sabía que los manglares eran necesarios para el sustento de la comunidad y por eso se convirtió en ingeniero medioambiental para proteger los manglares de San Lorenzo.

“Vemos el manglar como algo integral, a nosotros formando parte de él. Para nosotros, hablar del manglar es hablar de nuestras propias vidas”, afirma Inginio. “La oportunidad de tener manglares es el derecho al trabajo, es el derecho a la vida, el derecho a estar en un lugar, que sin depender de una decisión del Estado o del gobernante actual, nos permite tener como sostenernos”, agrega.

Como parte del Proyecto Binacional, WFP apoya a las comunidades afrodescendientes e indígenas awá, quienes viven a ambos lados de la frontera entre Colombia y Ecuador, para que realicen actividades de adaptación al cambio climático.

Pescadores en el manglar
Pescadores en el manglar. Foto: WFP/Giulio d'Adamo

Sin embargo, la contaminación y los efectos de la crisis climática dificultan la protección de los manglares. Montones de basura llegados de las zonas urbanas contaminan las aguas del territorio.

“Siempre le digo a la gente que esto es mucho peor que estar en el desierto. En el desierto sabes que estás en seco. Acá, estando con agua, no tienes agua. Así que estar en los manglares es complicado, hacer reforestación en los manglares es complicado”, señala Inginio. Pero este trabajo es esencial.

La conservación del ecosistema de los manglares ayuda a mitigar los efectos del cambio climático en las comunidades porque preserva sus recursos alimentarios y sirve de barrera natural contra las tormentas ciclónicas.

Hombre cargando cajas a los barcos
Un atracadero en San Lorenzo. Foto: WFP/Giulio d'Adamo

Desde el 2020, las comunidades han contribuido a la reforestación de 400 hectáreas de manglares. Preservar el medio ambiente va de la mano de la protección de las comunidades, comenta Inginio.

“Proteger a las comunidades, mantener el contacto con la gente, capacitar a las personas en lo que tiene que ver con la protección de los manglares es proteger al mismo ecosistema de los manglares”, dice este ingeniero.

Niños y sus familias al rededor de sus casas
Una vista de la comunidad de Punta Miguel, Isla El Brujo. Foto: WFP/Giulio d'Adamo

WFP apoya la conservación de unas 15.000 hectáreas de manglares para reducir las vulnerabilidades climáticas e implica a las comunidades en la protección de los ecosistemas de los que dependen.

Estas acciones se enmarcan en las actividades que ejecuta el Proyecto Binacional de Adaptación que es implementado por el Programa Mundial de Alimentos junto a la Confederación Comarca Afroecuatoriana del Norte de Esmeraldas (CANE) y la Federación de Centros Awá del Ecuador (FCAE) como socios ejecutores locales en Ecuador. Su financiamiento proviene del Fondo de Adaptación y en Ecuador son parte del proyecto el Ministerio del Ambiente Agua y Transición Ecológica (MAATE), que lidera su desarrollo, y el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), como entes rectores en materia climática y de agricultura, respectivamente.

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